Cómo volver a activar un proyecto creativo después de una pausa:
guía práctica para diseñadores UX/UI
Volver a un proyecto creativo después de una pausa es más difícil de lo que parece. No importa si esa pausa fue de una semana, un mes o varios: siempre hay una resistencia interna que nos dice que no estamos listas, que deberíamos esperar “un mejor momento”, o que ya perdimos el ritmo.
En mi caso, mi blog de la Bitácora de UX quedó en pausa desde el 25 de junio. No fue intencional; simplemente la vida, el trabajo y los proyectos se movieron rápido. Pero al momento de volver, me encontré con esa sensación tan familiar: ¿cómo retomar sin sentir que empiezo de cero?
Ese fue el disparador para este post. Porque si yo lo sentí, seguramente vos también.
Y si estás leyendo esta guía, probablemente tengas un proyecto —de diseño UX/UI, de escritura, de ilustración, de estudio, de portfolio o incluso un blog— que querés retomar pero no sabés por dónde empezar.
¿Por qué cuesta tanto volver a un proyecto creativo después de una pausa?
Antes de pasar a los pasos prácticos, vale la pena entender el “por qué”.
El mito de la productividad constante
En el diseño (y en la vida) existe una expectativa implícita: la idea de que para ser “buenos” profesionales debemos producir sin parar. Que la creatividad es un flujo que nunca se corta si sos lo suficientemente talentosa o disciplinada.
Pero es falso.
La creatividad es cíclica.
Los procesos de UX también.
Los proyectos avanzan en etapas: descubrimiento, investigación, ideas, prototipado, testing… y también descanso. La pausa no es un error del proceso: es parte del proceso.
La culpa que bloquea la creatividad
Cuando queremos volver después de un tiempo, aparece la culpa:
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“¿Por qué dejé esto colgado?”
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“Ya debería haber avanzado más.”
-
“Mejor espero tener más tiempo para retomarlo bien.”
Esa culpa genera un bloqueo invisible que nos retiene más que la propia pausa.
Entender esto es clave para liberar espacio mental para crear nuevamente.
Paso 1 — Aceptar la pausa como parte natural del proceso creativo
Lo primero, lo más simple y a la vez lo más difícil: aceptar que la pausa está bien.
Sí, está bien.
No te debés explicaciones.
No se rompe nada por detenerte.
Cuando aceptamos que la pausa fue necesaria —por trabajo, salud mental, estudio, saturación o simplemente la vida— desaparece la presión de “volver perfecta”.
Aceptar la pausa te prepara para retomar desde un lugar más fresco, más honesto y más creativo.
Paso 2 — Reconectar con el propósito del proyecto
Antes de abrir Figma o Blogger, hacete estas preguntas:
¿Por qué empecé este proyecto?
Volvé al origen.
¿Qué te movió? ¿Qué querías explorar, mejorar, comunicar, aprender o construir?
¿Qué cambió desde la última vez?
Probablemente vos cambiaste.
Tu contexto cambió.
Tu forma de diseñar también.
Tu proyecto puede necesitar evolucionar con vos.
¿Este proyecto sigue teniendo sentido para mí?
Si la respuesta es sí: seguimos adelante.
Si la respuesta es “sí, pero de otra manera”: excelente, hay espacio para reinventarlo.
Si la respuesta es no: también es válido. A veces soltar un proyecto abre espacio para nuevos.
Dedicale 10–15 minutos. Escribirlo en una nota o documento aclara más de lo que pensamos.
Paso 3 — Empezar con una microacción (la clave para destrabar)
El error más común al volver es querer hacer todo de golpe.
La realidad: las grandes reactivaciones empiezan con microacciones.
Ejemplos reales, simples y efectivos:
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Escribir una idea suelta para un post.
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Hacer limpieza de capas en un archivo Figma.
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Ordenar las carpetas de tu proyecto en Drive.
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Releer tus notas viejas.
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Hacer un moodboard nuevo.
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Redactar un párrafo (solo uno).
Las microacciones son poderosas porque generan movimiento.
Una vez que el proyecto “se mueve”, volver se vuelve natural.
Paso 4 — Definir un objetivo de corto plazo (pequeño, concreto y medible)
Elegí un objetivo para esta semana.
No 5.
No 3.
Uno.
El objetivo debe ser:
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Específico → “publicar un post”, “actualizar una sección del portfolio”, “diseñar la pantalla de inicio”.
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Realista → hacerlo en un tiempo que realmente tenés.
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Medible → sabés cuándo está terminado.
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Acotado → que no dependa de mil pasos previos.
Si volvés con un objetivo imposible, volvés a pausar.
Si volvés con uno concreto, volvés a fluir.
Paso 5 — Ordenar tu entorno creativo (mental y digital)
Muchas veces, la resistencia a volver no es falta de ideas. Es falta de orden.
Ordenar tu espacio es ordenar tu mente.
Limpieza digital
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Archivá documentos viejos.
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Renombrá archivos.
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Eliminá duplicados.
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Revisá carpetas en Figma o Drive.
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Hacé una limpieza de plugins que no usás.
Organizar tus herramientas de diseño
Creá un pequeño sistema de trabajo actualizado:
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Una carpeta para inspiración.
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Otra para avances.
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Otra para materiales finales.
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Un sistema de colores, componentes o design tokens (si aplica).
Notion, Trello o Google Keep como aliados
No hace falta armar un super sistema.
Con un tablero simple donde liste tus:
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ideas,
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avances,
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próximos pasos,
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referencias,
…ya tenés un soporte para retomar sin perderte.
Paso 6 — Permitirte volver distinta (y actualizar el proyecto con lo que aprendiste)
Entre junio y ahora, aprendiste cosas nuevas.
Tal vez una herramienta, un método, algo de UX writing, UI, IA o investigación.
No vuelvas al proyecto con la obligación de ser la misma persona que lo creó. Volvé con la versión actualizada de vos misma.
Eso puede significar:
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Cambiar el enfoque.
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Rediseñar partes del proyecto.
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Ajustar el tono.
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Reescribir algo que ya no te representa.
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Mejorar la experiencia.
Los proyectos crecen cuando sus creadoras crecen.
Paso 7 — Compartir el proceso (aunque no esté perfecto)
La perfección es una trampa.
El proceso es lo que realmente importa.
En el mundo UX/UI tenemos algo a favor: el proceso es parte del valor.
Mostrar avances, borradores, análisis y reflexiones tiene tanto peso como mostrar un resultado final.
Compartí:
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screens no terminadas
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wireframes
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aprendizajes
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cambios de dirección
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errores que te enseñaron algo
Hacer visible el proceso te acerca a tu audiencia, humaniza tu trabajo y te mantiene motivada.
Paso 8 — Recuperar la inspiración de forma estratégica
Para volver necesitás recargar tu creatividad. Algunas formas efectivas:
H3: Inspiración visual
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Dribbble
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Behance
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Figma Community
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Pinterest
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Figmalion
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Awwwards
Mirar qué hacen otros activa ideas nuevas.
H3: Inspiración conceptual
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Leer artículos de UX Collective, Nielsen Norman Group, A List Apart
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Escuchar podcasts de diseño
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Revisar casos de estudio
H3: Inspiración práctica
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Probar un plugin nuevo
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Rehacer una pantalla solo por diversión
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Jugar con IA para explorar variantes
La inspiración vuelve cuando la buscás. No siempre aparece sola.
Paso 9 — Incorporar la pausa como parte de tu metodología creativa
La última clave: dejar de ver las pausas como fallas.
Las pausas pueden ser:
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incubadoras de ideas
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momentos de reflexión
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espacios para adquirir nuevas habilidades
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oportunidades para ver el proyecto con otra perspectiva
Si empezás a integrar pausas conscientes en tu proceso, volver se vuelve natural, no doloroso.
Conclusión — Volver no es empezar de cero: es empezar renovada
Retomar este blog después de meses me recordó algo que a veces olvidamos:
Los proyectos creativos no se mueren cuando se pausan. Solo esperan.
Esperan a que volvamos con más herramientas, más claridad, más experiencia o simplemente más ganas.
Volver también es crecer.
Es aceptar que somos humanas, creativas y cambiantes.
Es construir desde donde estamos hoy, no desde donde “deberíamos” estar.
Gracias por estar acá después de esta pausa.
Gracias por volver conmigo.
Y si vos también estás volviendo a tu proyecto…
Bienvenida de nuevo.
Tu creatividad te estaba esperando.
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